La rentabilidad que ofrecen los alquileres viene en aumento desde hace más de un año. Según un informe está recuperando los niveles de cinco años atrás. Esto está generando que muchos inversores estén comprando propiedades para ese fin. Aprovechan la baja de precios de los inmuebles
El mercado inmobiliario está viviendo un cambio de tendencia y eso se refleja en el valor de las propiedades. Después de tres años a la baja, el 2022 muestra algunas señales alentadoras. Es que, en los últimos meses, los precios de las propiedades dejaron de caer, un dato que refleja un mejor clima de negocios en cuanto a la rentabilidad de los alquileres, el cual viene creciendo desde hace aproximadamente un año.
Así lo señala un informe realizado en forma conjunta entre la Universidad de San Andrés y Mercado Libre en base a datos de operaciones de Capital Federal y Gran Buenos Aires.
Según este estudio, el retorno que genera la locación de casas y departamentos continúa en ascenso desde finales del 2020.
En el caso de los departamentos, la rentabilidad en dólares varía según las zonas. En CABA, se obtiene hoy un margen de 3,5%. A comienzos del 2021, era de 2,3%. El pico de los últimos años se alcanzó en 2018 con 5%. La mejor rentabilidad se alcanza en el gran Buenos Aires norte con 3,7%.
En cuanto al segmento de las casas, el mayor beneficio se encuentra también en el GBA norte con 6,9%. Este registro se mantiene estable desde el inicio de la pandemia debido a la demanda generada por familias que decidieron mudarse a lugares con más espacio y naturaleza ante los cambios en las formas de trabajo con la generalización del home office.
En tanto, en CABA, la rentabilidad obtenida hoy se ubica en el 4,4%, significativamente por arriba del comienzo del 2021 que era de poco más de 2,5%.
Esta mejora se explica por distintos factores. La principal tiene que ver con el aumento de los alquileres. En diciembre se estima que hay una suba de más de 80% respecto a un año atrás. La ley de Alquileres que se está discutiendo en el Congreso sacó de la oferta a muchas unidades lo que impulsó el incremento de la locación de las propiedades que estaban en oferta.
Por otro lado, la suba del dólar no llega a ese nivel de ajuste, lo que hace que la rentabilidad mejore. A esto se suma que los precios de las propiedades venían en baja, lo cual favoreció a la rentabilidad.
Esta mejora en el negocio que ofrecen los alquileres está atrayendo, otra vez, a inversores a la compra de propiedades para ese fin.
En parte, se buscan propiedades para el alquiler tradicional, pero también crece el negocio del alquiler temporario para turistas -tanto nacionales como extranjeros- que, en muchos casos, se maneja directamente en dólares “billete”. Esto está provocando que se haya frenado la baja de los precios de los inmuebles.
Desde hace unos meses estamos viendo un amesetamiento en los valores de las propiedades y un aumento de las consultas y las operaciones. Los niveles de escrituras ya están en los registros del 2014 y 2015 y falta poco para alcanzar los picos del 2017 y 2018. Esos años marcaron un pico en la actividad impulsado por la aparición del crédito.
La recuperación del mercado de compraventa se percibe con más fuerzas en algunas provincias. En este caso, la demanda está relacionada con la mejora de la actividad agrícola ganadera y el turismo.
Hay muchas zonas del interior que ya están recomponiendo los precios. También en el gran buenos Aires norte se nota una demanda fuerte. Lo mismo sucede con los terrenos para construir que ya cotizan en su máximo históricos.
Fuente: mdzol.com